
Hay cuentos que parece que tienen facilidad para trasladarse a los escenarios. Es el caso de «La princesa y el pirata«, que ya ha sido adaptada al teatro en varias ocasiones, en España, en Brasil, en Colombia y por dos veces en México, la primera de ellas convertida en musical.
Durante este mes de febrero podrá verse una nueva versión del cuento de Alfredo Gómez Cerdá, esta vez para títeres, en la ciudad de Cuernavaca (México), a cargo del Grupo Chaneque, dirigido por Andrea Muro, que desde hace dos años perseguía con entusiasmo la idea.
Las representaciones tendrán lugar los domingos 10, 17 y 24, en el teatro Conejo Blanco, situado en la calle Gutenberg, núm. 8.