
Ed. Bayard. (Col. Leo Leo). Il. Jesús Gabán. Madrid,1987.
Traducido al francés, Sauvons notre parc, por Marie-Claude Favreau. Les Editions Héritage, Québec (Canadá), 1991.
Los del ayuntamiento quieren hacer una nueva reforma en la plaza del Árbol Solitario y achicarla aun más. Hugo y los niños están indignados, pues se van a quedar sin sitio para jugar. Menos mal que cuentan con la ayuda de don Amadeo, un anciano profesor de Química, ya jubilado.