Hacerse el muerto (con perdón)
En nuestro país –es una obviedad– agosto es tiempo de piscinas. Y esta sociedad “biempensante” en que vivimos ha procurado organizar y controlar al máximo todo lo relacionado con los baños públicos recreativos: horarios, indumentaria, calzado, normas higiénicas, comportamiento, etc. Hay que pensar que en una sola piscina pueden coincidir un mismo día cientos, o…